La ecosonda invertida (IES) es un instrumento anclado en el fondo del océano que mide con mucha precisión el tiempo de viaje acústico vertical (VATT), que es el tiempo que tarda un pulso acústico en viajar ida y vuelta desde el fondo del mar hasta la superficie del mismo. El VATT varía principalmente debido a los cambios en el perfil de temperatura de la columna de agua, que a su vez puede utilizarse como un indicador sensible de las trayectorias cambiantes de las corrientes oceánicas en muchos lugares. De esta forma, el IES es muy adecuado para supervisar los cambios en la estructura de la temperatura y la altura dinámica (señal baroclínica). Si cuenta con un sensor de presión opcional de Paroscientific, el instrumento es denominado PIES. Una combinación de IES, registrador de datos, y emisor acústico con sensores de presión Paroscientific y de corriente Aanderaa es denominado CPIES. Estos monitorean aspectos del entorno físico del océano durante períodos de meses a años. En la actualidad, el Modelo 6.2, es una combinación de IES, registrador de datos y emisor acústico, con mediciones opcionales de la presión del fondo, la temperatura y la velocidad y dirección de la corriente (con el sensor de corriente Doppler AanderaaTM adjunto). Los datos se procesan in situ y están disponibles (opcionalmente) a distancia mediante un enlace de telemetría acústica o una lanzadera de datos desechable por satélite. Además de las señales baroclínicas medidas por el IES, se pueden medir las variaciones de presión barotrópica cerca del fondo con el sensor de presión opcional. Puede funcionar en profundidades de agua de hasta 6700 m durante periodos de hasta un año y no requiere más equipo de amarre que un ancla.